Indice de Contenidos
- Huella de carbono en el Vino.
- ¿Qué es la huella de carbono en el vino?
- ¿Cómo se cuantifica la huella de carbono en viticultura?
- Origen de las emisiones de gases efecto invernadero en el sector vitivinícola:
- La huella de carbono generada durante el proceso de producción de una botella de vino genérico es de 2.2±1.3 kg CO2.
- La huella de carbono ligada a la producción de vinos ecológicos supone un 75% menos.
Huella de carbono en el Vino.
El cultivo de la vid y la producción de vino constituyen una de las industrias más antiguas y de mayor importancia hoy en día en el sector agroalimentario, la cual proporciona importantes beneficios económicos en numerosas regiones alrededor del mundo.
La mayor conciencia medioambiental actual derivada del cambio climático está llevando a numerosas empresas vitivinícolas a moverse hacia sistemas de producción de uva y vino alternativos más respetuosos con el medio ambiente, mejorando sus procesos productivos a través de la reducción de sus emisiones más contaminantes con el medio (Carballo-Penela et al., 2009).
¿Qué es la huella de carbono en el vino?
La huella de carbono (Figura 1) es una medida del conjunto de gases de efecto invernadero (dióxido de carbono, metano, óxido de nitrógeno, HFCs, PFCs, y hexafluoruro de azufre) emitidos de manera directa o indirecta por un individuo, empresa, producto, etc. como consecuencia de una determinada actividad, lo cual permite determinar su contribución al cambio climático global (Pandey et al., 2010).
¿Cómo se cuantifica la huella de carbono en viticultura?
Así, mediante el cálculo de esta medida se pueden identificar y cuantificar las fuentes más importantes de gases de efecto invernadero en un determinado proceso productivo, permitiendo conocer y controlar los puntos más críticos para poner las medidas pertinentes y así lograr un sistema más respetuoso con el medio que nos rodea.
Origen de las emisiones de gases efecto invernadero en el sector vitivinícola:
Huella de carbono en el vino: Dada su singularidad, en el sector vitivinícola existen emisiones de gases de efecto invernadero de muy diverso origen, pudiéndose hallar en las todas las etapas del proceso de vinificación (Rugani et al., 2013):
1- Emisiones propias de la implantación del viñedo/bodega: cambio en el uso del suelo.
2- Emisiones propias del cultivo de la vid: laboreos, podas, tratamientos fitosanitarios, vendimia, uso de maquinaria, etc.
3- Emisiones propias de la elaboración de vino: recepción de uva en bodega, despalillado, prensado, fermentaciones, etc.
4- Emisiones propias del embotellado: lavado de botellas, llenado de botellas, encapsulado, envasado, paletizado de cajas, etc.
5- Emisiones propias de la comercialización: distribución en el mercado local e internacional.
6- Emisiones propias del uso: conservación y consumo del vino.
7- Emisiones propias del fin de vida del producto: gestión de los residuos generados durante el cultivo de la vid, elaboración de vino, embotellado, etc.
De media, se estima que la huella de carbono generada durante el proceso de producción de una botella de vino genérico es de 2.2±1.3 kg CO2, aunque existe una gran variación de este valor debido a las diversas condiciones tecnológicas, geográficas y vitivinícolas que existen (Rugani et al., 2013).
La huella de carbono generada durante el proceso de producción de una botella de vino genérico es de 2.2±1.3 kg CO2.
Curiosamente, y aunque existe una gran variabilidad, los vinos blancos presentan de manera general valores de huella de carbono ligeramente superiores a los vinos tintos, probablemente debido a la singularidad de su producción.
Igualmente, la huella de carbono ligada a la producción de vinos ecológicos supone un 75% menos del sistema de producción tradicional, confirmando la mayor sostenibilidad de este sistema de producción.
La huella de carbono ligada a la producción de vinos ecológicos supone un 75% menos.
De las etapas anteriormente mencionadas, las emisiones ligadas al cultivo de la vid, al proceso de embotellado (Figura 2) y al fin de vida del producto son las que contribuyen de manera más significativa a la huella de carbono (Rugani et al., 2013), por lo que se proponen como las etapas de mayor interés para disminuir el impacto de la producción de una botella de vino en el medio ambiente.
Más información: La medición de la huella de carbono en el vino.
Escuela Universitaria de Ingenieria Técnica Agrícola. Universidad Politécnica de Madrid.
How big is wine’s carbon footprint, and how can technology reduce it?
Referencias huella de carbono en el vino:
Carballo-Penela, A., García-Negro, M.C., Doménech-Quesada, J.L. (2009). A methodological proposal for corporate carbon footprint and its application to a wine-producing company in Galicia, Spain. Sustainability 1, 302-318.
Pandey, D., Agrawal, M., Pandey, J.S. (2010). Carbon foofprint: current methods of estimation. Environmental Monitoring and Assessment 178(1), 135-160.
Rugani, B., Vázquez-Rowe, I., Benedetto, G., Benetto, E. (2013). A comprehensive review of carbon footprint analysis as an extended environmental indicator in the wine sector. Journal of Cleaner Production 54, 61-77.
Ingeniero Técnico Agrícola. UPV.
Colegiado nº: 2413
Especializado en Viticultura.
Gerente de Viveros Barber.